HAZ LO QUE QUIERAS

Un pequeño preámbulo de este "haz lo que quieras", cuando quieras, donde quieras; denota la coexistencia de cada cosa, de un deber, un derecho que desde que tenemos uso de razón nunca hemos hecho eso que tanto deseamos.

Desde que nacemos, hemos vivido bajo la tutela y responsabilidad de nuestros padres, guiándonos por los senderos del bien. Sin importar cada vez que se nos mete aquella amada y dulce piedra en el zapato; un fragmento tan peculiar al que llamamos problemas, los cuales son los primeros rasgos y factores que definirán nuestras andanzas, personalidad y el reflejo más sincero de la educación dada en el hogar.

Por tal razón, hablo de esos primeros rasgos y factores, ya que desde ese punto de partida veremos si somas capaces de huir o enfrentar cada piedra que se nos tope en el camino. Caminos que para la vida son un tránsito con un fin premeditado.

Ya teniendo claro ciertos elementos, podríamos decir en forma exclamativa ¡HAZ LO QUE QUIERAS!

Cuando digo "haz lo que quieras", no me refiero a que hagas lo primero que se te venga en ganas, ¡NO!, me refiero a que lo que hagamos lo pensemos, lo analicemos y comprendamos, que eso que queremos hacer sea tanto bien como para nosotros como para los demás.

Es un "haz lo que quieras" que define un lugar, un contexto donde ponemos a batallar dos de nuestros principios; la moral como parte de nuestra ética y la conciencia como pieza fundamental queda paso a la humildad emocional.

Ese "haz lo que quieras" que a simple vista es algo que suena tan simple, tan vació, que, sin embargo, es aquella batalla entre dos de nuestros principios, es decir, es ese tú y el tú ante la sociedad que son significados muy distintos digan lo que digan. Pues, sólo cambiamos cuando dejamos de hacer aquello que la gente tanto quiere o desea.

Tan pronto llegan las incógnitas que nos desgarran el pellejo y nos destruyen la conciencia.

Para esa dulce y preciosa chica a quien he echado de menos durante tanto, tanto tiempo... mi amiga, Angelika.

Crédito de la imagen: Théo Gosselin